Comprar una vivienda en Navarra suele llevar asociada la solicitud de un préstamo hipotecario. Son muy pocos los bancos que conceden hipotecas con el 100% del importe, por eso, compartimos unos consejos para ahorrar para la primera vivienda.
En una época en la que los salarios no son muy elevados y que el consumismo se ha adueñado de nuestras vidas, ahorrar lo suficiente para dar la entrada para un piso, cubrir los gastos asociados a la compraventa y tener dinero para la mudanza sin renunciar a un colchón de seguridad parece tarea imposible para muchos jóvenes.
Lo primero que debes hacer es una estimación realista de tu capacidad de ahorro. Para esto lo mejor es que registres todos los gastos que realizas a lo largo del mes. Te puede sorprender cuánto dinero gastas en los conocidos como gastos hormiga (café en el bar, bazar chino, comprar algo solo porque estaba en rebajas,…).
Una vez tengas todos tus gastos registrados, analiza los resultados y estudia si puedes hacer algún ajuste. Los grandes inversores del mundo sugieren que para conseguir ahorrar, ese dinero debe ser retirado de la cuenta corriente a principio de mes. Es un error muy común ahorrar solo con lo que sobra a final de mes. Como dicen muchos, «me sobra demasiado mes al final del sueldo», ¡evítalo!
Sé realista con el tipo de inmueble que te puedes permitir. Quizá tenías una visión idealizada de un barrio o de las dimensiones de una vivienda. Calcula cuánto podrías gastar de hipoteca teniendo en cuenta que esta no debe superar el 30% de los ingresos mensuales. Sobre esto, ajusta tus necesidades de vida: quizá estás dispuesto a renunciar a la terraza, a la habitación extra o a vivir en el centro. Recuerda que la compra de una vivienda debe ser un paso adelante, un lugar donde establecer tu hogar, un lugar de tranquilidad no de estrés por tener que renunciar a demasiado por hacer frente a las cuotas hipotecarias.
Si quieres ahorrar para comprar tu primera vivienda, debes establecer un plan. Igual que cuando quieres ponerte en forma te apuntas a un gimnasio para obligarte a ir y luchas contra la pereza los primeros días, debes conseguir el hábito del ahorro.
Piensa que una vivienda en propiedad tiene unos gastos asociados como el IBI, la comunidad de propietarios (si la hay) y el seguro de hogar. Todos estos gastos deben ser tenidos en cuenta para decidir el importe máximo de hipoteca que puedes pagar.
Cuando te habitúes a registrar tus gastos y a ahorrar verás lo cerca que comienza a estar tu nuevo hogar. Necesitarás constancia pero si tu objetivo está claro lo conseguirás enseguida. Mientras consigues el dinero para la entrada, puedes pensar cómo te gustaría decorarla, cómo debe ser el barrio, las conexiones o qué es lo que más valoras en la elección de tu primera vivienda navarra.